La operación de las orejas es una técnica muy segura y muy positiva para el paciente tanto desde el punto de vista psicológico como por motivo estético.

La otoplastia busca corregir tres defectos básicos:

Correcta distancia desde la oreja al cuero cabelludo por detrás

Correcta simetría entre ambas orejas

Corrección del tamaño y la forma de las distintas partes que integran la oreja.

En la otoplastia

El abordaje quirúrgico se realiza desde detrás de la oreja.

Se recorta de la parte de concha auricular si existe exceso conchal.

Se remodela el pliegue de la oreja si es necesario, con puntos de sutura.

Se corrige el hélix si forma un saliente que proyecta parte de la oreja.

Tras todo ello se sutura la piel y se coloca un vendaje en forma de cinta de tenis que el paciente debe llevar durante una semana.

No hace falta retirar las suturas y el paciente debe mantener reposo relativo durante 4 días.

La cirugía de corrección de las orejas puede ser algo molesta pero se controlan bien las molestias del postoperatorio con analgésicos.